julio 25, 2008

Aníbal y las antorchas

Durante la segunda guerra Púnica (219-202 a C), el gran general cartaginés Aníbal devastaba todo en su marcha sobre Roma. Aníbal era conocido por su perspicacia y su ambigüedad, bajo su liderazgo, el ejército de Cartago, aun siendo menos numeroso que el romano, siempre conseguía superarlos.

Sin embargo, en cierta ocasión, los exploradores de Aníbal cometieron un terrible error, llevaron las tropas a un terreno pantanoso, con el mar a sus espaldas. El ejército romano cerco los pasos de montaña que llevaban al interior del país; el general Fabio, estaba optimista, ya que por fin había logrado atrapar a Aníbal, apostó sus mejores centinelas en los pasos y elaboró una estrategia para destruir las fuerzas cartaginesas; pero en medio de la noche, los centinelas vieron un espectáculo lleno de misterios: una enorme procesión de luces trepaba por la montaña, eran miles y miles de luces; si aquello que veían era el ejército de Aníbal, daba la impresión como si de repente se hubiera centuplicado.

Los centinelas discutieron acaloradamente sobre que era todo aquello… ¿sería que el ejército cartaginés había recibido refuerzos desde el mar?, ¿Había tropas ocultas en la zona que no contemplaron?; ¿Eran fantasmas?... Al parecer, ninguna explicación tenía sentido. De pronto, mientras los centinelas romanos observaban y continuaban su discusión, la montaña se colmó de fogatas, al mismo tiempo que un espantoso ruido, como si fuera el resonar de miles de cuernos, llegaba desde el valle. Convencidos que se trataba de demonios, los más valientes y prudentes centinelas del ejército romano, huyeron aterrados abandonando sus posiciones.

Al día siguiente, Aníbal había logrado escapar de aquella trampa y del asedio romano. ¿Cuál había sido su estrategia? Fue muy simple, ordenó que ataran fajos de ramas secas a los cuernos de los bueyes que viajaban con sus tropas como animales de carga y los encendieran; así, iban a dar la impresión de miles de antorchas llevadas por un enorme ejercito que subía por la montaña. Cuando las llamas tocaron la piel de los animales, estos se dispersaron en todas direcciones, mugiendo aterrados e incendiando toda la ladera, logrando estremecer al ejército romano.

La clave del éxito de Aníbal, no estaba en las antorchas ni en las fogatas ni en los ruidos aterrados de los bueyes, sino en que Aníbal creó un enigma con el que capturó la atención de los centinelas romanos y fue aterrándolos poco a poco.

Un consejo: Puedes buscar llamar la atención a cualquier precio, incluso puedes generar temor al hacerlo; pero ten en cuenta que antes de tomar una decisión, debes asegurarte que es la correcta, de lo contrario, lo puedes pagar caro.

Recuerda…

Disfruta el tiempo.
Sé fiel contigo.
Sigue tu camino.

La primera vez que me engañes, será culpa tuya; la segunda vez, la culpa será mía.
Proverbio árabe

Hasta un nuevo encuentro…
Khyronthell

Ilustración: Mattew Stawicki

julio 11, 2008

Mokèlé-mbèmbé

El Mokèle-mbèmbé (en lingala "el que detiene los ríos"), también conocido como mbulu-embembe en Camerún; nyamala y amali en Gabón, es una bestia común de la mitología de varias culturas del África Central. Mayoritariamente se la ubica en los pantanos del río Likouala-aux-Herbes en la República Popular del Congo.

Los relatos y la tradición oral de varias tribus africanas lo describen como un animal de color gris pardo, de tamaño superior al de un elefante, de unos 4 a 6 metros de alto y 5 a 10 metros de largo; que tiene el cuello largo y flexible y un solo diente, aunque muy grande; otros relatos aseguran que se trata de un cuerno. Hay quienes hablan de una cola musculosa como la de un caimán. Se dice que vive en los ríos y trepa a las orillas en pleno día para buscar alimento y que su dieta estaría compuesta principalmente por vegetales, aunque hay reportes que dicen que cazarían humanos e hipopótamos. Sus huellas se parecen a las del hipopótamo, aunque son mayores y palmeadas; según algunos exploradores, son circulares, del tamaño de una sartén, con tres dedos.

Las historias sobre el Mokèlé-mbèmbé son aparentemente un antiguo componente de la tradición oral de varias tribus africanas, entre ellas la de los Pigmeos. Los pescadores nativos muestran una especial aversión a ciertas zonas pantanosas en donde se cree habita la criatura, en vista de su presunta habilidad para cazar humanos.

Hace poco tiempo, se dio a conocer un relato que describe una supuesta matanza en 1960, de un ejemplar de Mokèle-mbèmbé en las cercanías del Lago Télé. Según esta historia, un grupo de pigmeos de la zona pantanosa del Likouala construyó una pared para mantener a estas criaturas a raya. Una de ellas pudo atravesar la barrera, lo que originó la feroz respuesta de los nativos. William Gibbons señala: "El Pastor Thomas, quien conocía a los nativos, también mencionó que dos pigmeos imitaron los gritos del animal mientras era atacado y lanceado... más tarde se celebró un festín por la victoria, durante el cual partes del animal fueron cocinadas y consumidas. Sin embargo, aquéllos que participaron de la fiesta, eventualmente murieron, ya fuera por envenenamiento alimenticio o por causas naturales. En todo caso, debe subrayarse que los pigmeos rara vez viven más de 35 años, y que las mujeres de la etnia dan a luz desde los doce años. Algunas personas también creen que la mitificación relacionada con el Mokele-mbembes fue la que empezó con este incidente." (Sic)

La existencia de este extraño animal en las regiones pantanosas del corazón de África, es hoy un secreto a voces, como las de los nativos para los que su existencia está fuera de toda duda; como así también para los pocos occidentales que han podido ver a este excepcional animal, como el escritor y naturalista inglés Ivan T. Sanderson quien pudo ver en 1932 a esta criatura en una de sus expediciones por la pantanosa zona del río Mainyu, en el África ecuatorial occidental; el explorador, cuenta que se encontraba navegando junto con sus compañeros, cuando de una cueva cercana surgió un ruido ensordecedor y según relata él mismo: “vimos cómo algo enorme se levantó frente a nosotros, convirtiendo el agua en espuma, la cabeza negra de un animal semejante a una enorme foca, aunque mucho más ancha que larga”.

En 1982, el doctor Roy Mackal, de la Universidad de Chicago, organizó una exploración de la zona norte del lago Likouala, donde encontraron las huellas de un animal desconocido pero de tamaño superior a las de un elefante. Otra expedición de científicos de la universidad de Brazzaville: repitió pocos meses después el intento, y en esta ocasión, el biólogo Marcellín Agnagna y su equipo se encontraron frente a frente con ese animal. Se trataba de una especie con aspecto distinto a cualquier otra conocida hoy en día, y con una morfología muy similar a la de un gran dinosaurio saurópodo que, parecía surgido del Mesozoico, período del secundario en que los grandes saurios dominaban la Tierra.

Una de las últimas exploraciones la realizó un equipo de japoneses, entre marzo y abril de 1988, algunos de los cuales habían participado con anterioridad en otros viajes a la zona. Las marismas del lago Telle, en la misma región de Likouala fue el terreno elegido para realizar la expedición; numerosos lugareños habían testificado sobre su contacto directo con el monstruo. Uno de ellos afirmó haberlo visto entrar en el lago apenas un mes antes, y otro, un cazador de elefantes llamado Inmanuel Mongoumelo, dice que lo vio en los ríos Sanga y Bai, que están conectados con el lago Telle. Incluso varios de los ancianos de la aldea recuerdan que, a principios de siglo, una de estas criaturas fue cazada por los pigmeos de la cercana zona de Oumé.

Esta sospecha de que en algunas zonas apartadas del continente africano hay un extraño y enorme animal de costumbres anfibias no es algo reciente. Uno de los grandes exploradores y cazadores del pasado siglo, Alfred Aloysius Horn, cuenta que: "Las huellas de la bestia eran del tamaño de unas grandes sartenes, pero con tres enormes garras", al poder ver personalmente las pisadas de un desconocido animal que los indígenas del Camerún llamaban Jagonini, (buceador gigante); pero, también podría ser el caso, que el Mokèle-mbèmbé sea simplemente un mito persistente. En tal sentido, Hans Schomburgk, cazador de comienzos del siglo XX que fue contratado por Carl Hagenbeck para que capturara algunos ejemplares para su parque zoológico de Hamburgo, juzgó que: "Los nativos que desean complacer al visitante blanco y al mismo tiempo esperan alguna recompensa valiosa están demasiado dispuestos a garantizar que conocen un animal de piel azul, seis patas, un solo ojo y cuatro colmillos. El tamaño de la bestia dependerá de quien lo pregunte. El nativo dirá lo que cree que el hombre blanco desea escuchar". (Sjögren, 1980)

Recuerda…

Disfruta el tiempo.
Sé fiel contigo.
Sigue tu camino.

Los ojos no sirven de nada a un cerebro ciego.
Proverbio árabe

Hasta un nuevo encuentro…
Khyronthell

Ilustración: Les Edwars

julio 04, 2008

La Caja de Pandora

Según el mito griego, Pandora (que en griego significa "todos los dones") fue la primera mujer mortal que dio Zeus a los hombres, como parte del castigo impuesto a Prometeo, cuando este lo engañó y robó el fuego sagrado (las semillas de Helios) a los dioses y se lo entregó a los hombres.

Prometeo, hijo de Japeto y Clímene y hermano de Atlante, Menecio y Epimeteo, le prohíbe a éste último que reciba regalos de Zeus; pero Epimeteo al ver la belleza de Pandora no pudo contenerse, y enamorándose de ella, la aceptó como esposa.

Zeus enfurecido por lo hecho por Prometeo, ordenó la creación de una mujer que fue llenada de virtudes por diferentes dioses;
Hefesto (dios del fuego) la moldeó de arcilla y le dio la chispa de la vida; Palas Atenea (diosa de la sabiduría) le dio su ceñidor y la engalanó. Cada dios le otorgó a Pandora una cualidad como la belleza, la gracia, la persuación, y la habildad manual, entre otras; pero Hermes (mensajero de los dioses e intérprete de la voluntad divina) puso en su corazón la mentira y la falacia.

Zeus le dio el nombre de Pandora (la mujer de todos los dones) y le regaló una ánfora (la expresión «
caja de Pandora» en lugar de jarra o ánfora es una deformación renacentista) que contenía todos los males, advirtiéndole que nunca debía abrirla. Pandora a penas la vio, la abrió liberando a todas las desgracias humanas (la enfermedad, la fatiga, la locura, el vicio, la tristeza, la pobreza, el crimen, etc.). Para cuando logró cerrar la jarra, lo único que quedaba adentro era la esperanza, por lo que los humanos no la recibieron.

Según Los Trabajos y Los Días de Hesíodo, de este mito proviene la expresión “abrir la ánfora de Pandora”, y en esta tradición, Pandora representa la perdición de la humanidad al igual que Eva. Pero de acuerdo con otra costumbre, el ánfora contenía todos los bienes y Zeus se la entrega a Pandora, para que se la regale a Epimeteo el día de su boda, pero ella la abrió imprudentemente, y todos los bienes se escaparon y volvieron al Olimpo (lugar donde viven los dioses), dejando a los hombres afligidos por todos los males, con el único consuelo de la esperanza; de ahí viene la expresión: la esperanza es lo ultimo que se pierde.

Este es un pequeño relato hallado al pasar, de lo sucedido en aquella ocasión que, quizá no refleje con severidad lo ocurrido, pero resulta interesante si uno se imagina siendo parte de la historia…

Cierto día, el poderoso Zeus, furioso por lo hecho por Prometeo cuando robó las semillas de Helios, y viendo que los hombres se habían vuelto malvados y soberbios, decidió castigarlos, y llamando a su hijo Hefesto, le ordenó:

- Hefesto! Necesito que me crees rápidamente una mujer.

El dios de fuego, que había llegado distraído hasta el trono de su padre, se sobresaltó al oír aquello. Y exclamó:

- ¡Crear una mujer!

Pero, ante la insistencia de Zeus, Hefesto, obediente, empezó a fabricar la mujer que su padre le pedía con tanto interés; la modeló hábilmente de arcilla hasta hacerla en todo semejante a las bellísimas diosas. Finalmente, le dio por alma una chispa de fuego divino que ardía en el Olimpo.

Afrodita acudió para admirarla y le dio belleza, mientra que la diosa de la sabiduría, Palas Atenea, le regaló un cinturón de perlas, un vestido de púrpura y piedras preciosas; asimismo la bella y dulce Venus esparció sobre la cabeza de la recién creada doncella las más exquisitas virtudes femeninas; mientras las Gracias, las Charites y las Horas le adornaban el pecho y los brazos con joyas refulgentes y guirnaldas de flores perfumadas; también Hermes, el mensajero de los dioses, le dio la palabra fácil y el ingenio rápido, esto es que puso en su corazón la mentira y la falacia.

Zeus, por ultimo le ofreció su regalo a la bellísima mortal antes de enviarla entre los hombres y le dijo:

- Te doy el nombre de Pandora, ¡Oh, graciosa doncella! Tu nombre significa la mujer “de todos los dones”. A los que acabas de recibir añado éste mío. Se trata de ésta ánfora que llevarás contigo cuando bajes a la Tierra. Contiene todos los males que pueden hacer llorar, sufrir y destrozar a los hombres. Guárdate, pues, de abrirlo por nada del mundo. Si lo hicieras, los males se esparcirían por la Tierra, mientras que aquí permanecerán encerrados, eternamente presos, sin que puedan perjudicar a nadie.

La mujer recién creada, acogió con gratitud el don de Zeus y sobre un magnífico carro descendió a la Tierra.

La curiosidad de Pandora, poco a poco empezó a inquietar su pensamiento. ¿Qué contenía el precioso regalo de Zeus? ¿Todos los males? ¿Y si la abriese apenas un poquito y mirase con precaución para ver cómo eran?

Pandora destapó el ánfora e inclinó el rostro hacia la breve abertura, pero tuvo que apartarse rápidamente, presa del mayor espanto. Un humo denso, negro, acre, salía en enormes espirales, mientras miles de horribles fantasmas se dibujaban en aquellas tinieblas que invadían el mundo y oscurecían el Sol.

Eran todas las enfermedades, todos los dolores, todas las fealdades y todos los vicios. Todos ellos, rápidos, incontenibles y violentos, salían del ánfora irrumpiendo en las tranquilas vidas de los hombres.

En vano, Pandora trataba afanosamente de cerrarla, de cortar el paso a los males, de remediar el desastre. El Destino inexorable se cumplía y desde entonces la vida de los hombres fue desolada por todas las desventuras desencadenadas.

Cuando todo el humo denso se esfumó en el aire y el ánfora parecía vacía, Pandora miró al interior y vio todavía un gracioso pajarillo de alas tornasoladas. Era la esperanza.

Se apresuró a cerrarla impidiendo así que la esperanza se escapara al igual que todo lo que había contenido en su interior.

De ésta manera se conserva guardada en el rincón más profundo del corazón, la Esperanza de los hombres.

Recuerda…

Disfruta el tiempo.
Sé fiel contigo.
Sigue tu camino.

Antes de iniciar la labor de cambiar el mundo, da tres vueltas por tu propia casa.
Proverbio chino

Hasta un nuevo encuentro…
Khyronthell

Ilustración: Boris Vallejo

abril 18, 2008

El Holandés Errante

La historia del Holandés Errante o el Holandés Volador (The Flying Dutchman), es una de las más famosas y quizá de las más antiguas leyendas del mar, ya que circula desde hace más de 400 años. Se trata en pocas palabras de un barco fantasma que no puede volver a puerto, y está condenado a vagar para siempre por los océanos del mundo.

La versión más conocida de la historia del Holandés Errante, cuenta que la nave de un tal capitán Vanderdecken, fue atrapada en una terrible tormenta cuando curvaba el cabo de Buena Esperanza. Los pasajeros aterrorizados, rogaron a Vanderdecken que se refugiara en un puerto seguro o que, por lo menos, arriara velas a intentara capear el temporal, pero el enloquecido capitán se rió de sus súplicas y atándose al timón, comenzó a cantar canciones sacrílegas.

La tripulación también se alarmó por la conducta de su capitán e intentó hacerse con el control de la nave, pero el intento de motín fue sofocado cuando Vanderdecken arrojó a su líder por la borda, mientras los horrorizados pasajeros y tripulantes se encomendaban a Dios. En respuesta a sus plegarias las nubes se abrieron y una luz incandescente iluminó el castillo de proa, dejando ver una figura gloriosa que según algunos, era el Espíritu Santo, y para otros, Dios.

Relatan que ésta figura se enfrentó con Vanderdecken y le dijo que, ya que disfrutaba con el sufrimiento ajeno, desde ese momento sería condenado a recorrer el océano eternamente, siempre en medio de una tempestad, y que provocaría la muerte de todos aquellos que lo vieran, que su único alimento sería el hierro al rojo vivo, su única bebida la hiel, y su única compañía el grumete, a quien le crecerían cuernos en la cabeza y tendría las fauces de un tigre y la piel de una lija. Con estas palabras la visión desapareció, y con ella todos los pasajeros y tripulantes. Vanderdecken y el grumete quedaron abandonados a su destino.

Ésta es la versión clásica de la historia del Holandés Errante; pero hay quienes sostienen que la historia se originó a partir de un hecho real, aunque no hay acuerdo sobre cuales fueron esos sucesos. Hay una versión que nace de la saga escandinava de Stote, un vikingo que robó un anillo a los dioses y cuyo esqueleto, cubierto con un manto de fuego, fue hallado después sentado en el palo mayor de una nave negra y fantasmal.

Por otro lado, ciertas fuentes citan que fue el capitán holandés Bernard Fokke (siglo XVII) quien sirvió de modelo para la historia del buque fantasma. Fokke fue célebre por la extraña velocidad de crucero que alcanzaba en las travesías entre Holanda y Java, por lo que se sospechaba que había firmado un pacto con el demonio. Asimismo se dice que éste juró, de cara a una tormenta, que no daría marcha atrás hasta haber doblado el Cabo de Buena Esperanza aunque le costase llegar al Juicio Final. Se ha hablado también de un horrible crimen cometido a bordo del barco, e incluso de una terrible epidemia que infectó a la tripulación, por la cual no se le permitió desembarcar en ningún puerto, siendo condenados desde entonces (barco y marineros) a navegar eternamente, sin posibilidad de pisar tierra. Con respecto a las fechas en que hubo ocurrido, se mencionan los años 1641, 1680, 1729...

Esta historia establece algo más que una ficción, acaba siendo una funesta historia del mar para asustar a crédulos marineros de agua dulce en tabernas portuarias. Se cuenta que éste barco fantasma fue avistado en numerosas ocasiones, como por ejemplo, que el 3 de agosto de 1942, alrededor de las 21 hs cerca de Ciudad del Cabo, Nicholas Monsarrat dijo ver un barco de vela fantasmal al que le hizo señas pero no obtuvo ninguna respuesta; hay otra que dice que durante un día tranquilo de 1941, una muchedumbre en la playa Glencairn vio un barco con las velas llenas de viento, pero desapareció cuando esto estuvo a punto de estrellarse contra las rocas; también se dijo que fue visto en Muizenberg, en 1939.

Las versiones de la leyenda son innumerables y ha inspirado muchas obras de ficción. Algunas cuentan que la historia originariamente es holandesa donde el capitán recibe el nombre de Falkenburg, mientras que otras afirman que está basada en la obra de teatro The Flying Dutchman (1826) del dramaturgo inglés Edward Fitzball, o en la novela The Phantom Ship («El buque fantasma», 1837) de Frederick Marryat, donde da al capitán del barco el nombre de Van der Decken (que significa «en cubierta»).Otras versiones aluden a la ópera El holandés errante, de Richard Wagner (1841) y a The Flying Dutchman on Tappan Sea de Washington Irving (1855) donde el capitán recibe el de Ramhout van Dam.

Cabe recordar que existen muchos casos de barcos que fueron abandonados por su tripulación, creyendo que estaban a punto de zozobrar, y que luego siguieron a flote durante días, semanas, meses e incluso años; el más famoso de estos barcos es el Mary Celeste, pero no es el único, quizá una de las historias más notables sea la del Marlborough, que desapareció en 1890 mientras se dirigía de Australia a Inglaterra, hallando después de 23 años frente a las costas de Chile.

Si es verdad que el barco aun navega los mares o es simplemente un mito, quizás sólo lo sepan el mismo capitán y aquella figura que ante él se apareció; lo cierto es que la historia del Holandés Errante se ha extendido por todo el globo e incluso ha llegado al cine; por las dudas, veamos bien el horizonte porque resulta fácil imaginar el efecto en las mentes de supersticiosos, marinos o no, cuando ven al buque abandonado emerger súbitamente de la niebla.

Recuerda…

Disfruta el tiempo.
Sé fiel contigo.
Sigue tu camino.

La tierra tiene límites, pero la estupidez de la gente es ilimitada.
Gustave Flaubert

Hasta un nuevo encuentro…
Khyronthell

Ilustración: Anne Stokes

abril 11, 2008

Basilisco

Es el mítico rey de las serpientes de la mitología griega. El Basilik, que significa “pequeño rey”, era considerado en el siglo VIII, una serpiente con unos cuernos en la cabeza en forma de corona.

Su creencia se esparció por toda Europa, cuando Roma expandía su dominio, por ese entonces, Plinio el Viejo en su conocida Historia Naturalis, lo describía como el resultado de la unión de una serpiente con un gallo; una serpiente con una corona de oro de escaso tamaño y pésimo genio ya que su potente veneno logra marchitar las plantas y su mirada es tan mordaz que mata a los hombres".

Su origen no es del todo cierto, en el Bestiario de Pierre de Beauvais escrito en 1206; el autor alude a que el Basilisco, tenía que nacer de un huevo deforme, puesto por un gallo de siete años de edad, durante los días de la estrella del can mayor sirio, el huevo, era fácil de reconocer ya que no tenía forma oval sino que era esférico; no tenia cascaron sino que estaba recubierto por una gruesa membrana que, según algunos, era veteada. Este huevo era incubado por un sapo durante 9 años, al final nacía una criatura malvada y ponzoñosa que poseía las características de sus progenitores: cabeza de gallo, cuerpo de sapo y cola de serpiente. Otra manera de nacer y probablemente la más aceptada, es que nace de un huevo puesto por un gallo e incubado por una serpiente, que nace con cuerpo de gallo, lengua de serpiente y cresta.

Entrada la Edad Media, pasó a ser un gallo con cuatro patas, plumas amarillas, grandes alas espinosas y cola de serpiente que podía terminar en garfio; también hay versiones con ocho patas y escamas en vez de plumas.

El Basilisco era extremadamente temido, se creía que emanaba llamaradas de fuego por la boca, logrando que se secaran las plantas, se quemaran los pastos, se quebraran las piedras y el agua se envenenaba con su veneno; pero su más temible característica era que podía matar a un hombre o un animal simplemente con mirarlo a los ojos.

La única forma de matar un basilisco era colocando un espejo frente a sus ojos, el animal moría al ver su propia mirada venenosa; por eso era tradición llenar la casa de espejos, ya que se creía que se ocultaba en los rincones. Se decía también que un basilisco moría cuando oía el canto de un gallo, que para él era mortal, o se topaba con su principal enemigo, la comadreja que es inmune a su mirada. Hay leyendas que cuentan que Alejandro Magno logro matar uno, y que San Trifón el logro domesticar a la bestia.

Como casi todas las bestias mitológicas, el basilisco tiene una larga historia entre los mitos y su origen se diluye en el tiempo. Si bien han quedado registros de su creencia o existencia en las artes, son los relatos escritos los que cuentan con mayor detalle su historia; por ejemplo, los egipcios creían que el basilisco nacía de los huevos de Ibis; en el Antiguo Testamento hay siete referencias al basilisco, en cuatro libros distintos. En el siglo I DC, es visto como una serpiente excepcionalmente dañina, y hacia el siglo VIII, era considerado una serpiente con una mancha en la cabeza en forma de corona.

A lo largo de la Edad Media, son comunes en Europa los bestiarios, Isidoro de Sevilla copia a Plinio con modificaciones propias en el siglo VII, uniendo al basilisco con otros seres como el Catoblepas (cuadrúpedo de pesada cabeza que mata al que mira sus ojos, y al que citan, entre otros, Elieno, Ateneo, Solino y Pomponio Mela), o la Cockatrice (una criatura legendaria que parece un gallo con la cola de lagarto, descubierto a finales del siglo XII en la Historia Natural de Plinio, como pariente del basilisco, y descripta por Laurence Breiner como la criatura que nadie vio; que nació por accidente a finales del siglo XVI y murió a mitad del siglo XVII, víctima de la nueva ciencia.)

Recuerda…

Disfruta el tiempo.
Sé fiel contigo.
Sigue tu camino.

Cada paso que da el zorro le acerca más a la peletería
Proverbio chino

Hasta un nuevo encuentro…
Khyronthell

Ilustración: Anne Stokes

marzo 21, 2008

El culo

En esta oportunidad, les dejo más que un texto encontrado, un recopilado, un escuchado. La cosa es que un día de esos en los que uno esta más al pedo que de costumbre, me puse a oír algunas recopilaciones de cosillas grabadas y ahí lo encontré.

Se trata de un ensayo, o reflexión o como lo quieran llamar de ENRIQUE PINTI, un capo cómico de aquellos, bastante mórbido para algunos, pero un tipo que no se guarda cosas, que dice lo que piensa y como lo piensa y si no te gusta lo que oís, tenés otra opción, no lo escuchas y listo.

Este buen argentino, participo en el año 2000 de un ciclo televisivo que emitía Canal 13 al que llamaron, EL CLUB DE LA COMEDIA; allí se dieron cita varios chistocientos y me he reído mucho con todos, pero sin duda alguna, lo hecho por Pinti es, como diría el locutor de Pettinato ESPECTACULAR!!!

EL CULO

¡Pobre culo! Se lo acusa de todo lo malo, vergonzoso, poco elegante, escatológico, grosero, vulgar, sucio, ante natural, asqueroso, denigrante, inmundo y feo que pueda albergar el género humano.

Lo peor que nos puede pasar en la vida, es que todo salga como el culo; la pero cara, es la cara de culo; las cosas que caen mal caen como una patada en el culo; mucho peor que el chupamedias es el chupaculos; lo mas incomodo y lejano queda siempre en la loma del culo; cuando algo sale mal, generalmente para amar, caemos de culo.

Ni hablar de los derivados; sos una mierda!!! Quien mierda te crees que sos??? Andate a la mierda!!! Esta película es una mierda!!!. Sin mencionar que el adjetivo calificativo mas descalificador y valga la redundancia, es el formado por nuestra discriminación preferida: Negro, turco, judío, maricón, loca, puta, milico, vigilante, tano, gallego, coreano, ponja, indio, paraguayo, chileno, bolita, yorugua, etc., seguido por el infaltable… de mierda!!!

Derivado dos. A la borrachera se la llama pedo, que puede ser desde el pedo triste al pedo atómico; y cuando alguien en pedo llega al culo de la botella es porque se ha acabado todo el vino, o sea que, el culo de la botella es lo peor que le puede pasar a un borracho de mierda!!!

Acertar de pedo, es propio de chantas e improvisados, cuando no de tahúres; vivir al pedo es desperdiciar la vida; hablar al pedo es propio de ignorantes.

Las relaciones anales son consideradas antinaturales por autoridades eclesiásticas y opinadores ocasionales, desde Papas a predicadores de TV, desde gobernantes a estrellas de cine han condenado su practica, el gran pensador Mel Gibson, famoso por mostrar el culo en cuanta película pudo, califico a las practicas anales como, “cosas de maricas” y rubrico su cristiano, occidental y piadoso pensamiento con una frase que lo pinta de culo entero, dijo el filosofo: “el culo yo lo uso nada mas que para cagar”. No gano el premio de literatura Nóbel, pero quedo para el culo.

Claro que también a la buena suerte se le dice culo o tarro u ocote, no cierto? También es claro que hermosos culos han jalonado la historia universal; desde “Las tres Gracias” al “David”; desde los rotundos culos mórbidos de Rubens, hasta los apretaditos glúteos de modelos, trapecistas, bailarines, bailarinas, atletas y rumberas de todos los tiempos que ha sido motivos de admiración, festival pal´ojo, silbidos de aprobación y solaz, para el pobre y atribulado genero humano acosado por hambrunas, pestes, guerras, ministros de economía, genocidios, persecuciones, inquisiciones, tormentos, injusticias, pobreza, malarias varias, arbitrariedades, plagas, bacterias, virus, locuras, traumas y demás horrores.

Con todo esto, quien se atrevería hoy en día, en este año 2000, a decir que hablar del culo, es una mierda, hereje, mas al pedo que bocina de avión? Quien?

Mucha gente bien pensante lo encuentra sencillamente repugnante, y no vacilaría en tachar de falto de talento al que usara su ingenio en hablar de él; “- que desperdicio!!!” dirían escandalizados; “- que problemas y taras sexuales ocultara una persona para usar su pluma en hablar acerca del culo!!!” y se pondrán colorados de solo mencionar la puerca palabra.

Es cierto que hoy en día, se muestran demasiados culos y que han convertido el culo en un objeto de culto. Es verdad que las filosofías machistas y sexistas han convertido al culo de la mujer, en algo que amenaza en sacar el cetro de lo mas lindo, a las famosas y nunca bien ponderadas tetas, y también hay que decir que como revancha, mucha mujer colma locales de streaptease masculino para vivar hasta el aullido de guerra, culos masculinos protuberantes y llenos de barniz y purpurina.

Pero debemos aclara y separar…

Una cosa son los glúteos y nalgas, mórbida carne, apetecible o no según las edades y los gustos pero carne al fin, y otra el culo en sí, en su parte más profunda y oculta digo, su ojo único y sabio que se encarga de los trabajos sucios, sin los cuales nuestro organismo no funcionaria.

Los macho de más de 50 años, saben que tarde o temprano tendrán que entregar su preciado y vergonzante ojo trasero al dedo enguantado del especialista en próstata; especialista en próstata al que, si son sabios, deberán recurrir en prevención de mayores males.

Y ahí los tenés al despreciable agujero sirviendo de puerta de entrada para evitar horribles consecuencias; si no fuera por esa puerta trasera moriríamos antes de tiempo; es todo un tema, todo un tema ponerse con el culo mirando al norte, en cuatro patas, en la camilla y así, sin un whisky, sin un beso, sin escuchar “Extraños en la noche” por Frank Sinatra y sin la menor ganas de sentir la intrusión médica, rogando al intestino silencio!!!, para no aumentar con sonido THX o Dolby Stereo el bochorno de la situación en sé. Pero gracias al ojete, todo lo malo sale, y para algunas minorías, todo lo bueno entra.

Yo me pregunto, con tantos méritos, alguien le ha rendido un homenaje? No, desde el maestro Quevedo, más de 300 años atrás, nadie ha pedido un respetuoso aplauso para ese ojo terapéutico; para mí es un alivio hacerlo; es un alivio y nunca mejor dicho… Un respeto para el ojete!! Un respeto para Quevedo!!!

Es muy fácil ser poético hablando de flores, hermosas mujeres y atardeceres dorados; pero hay que tener mucho valor, y hay que tener mucho ingenio para hablar de algo tan nuestro y que casi nunca podemos ver a menos que, haciendo acrobacias, tratemos de sacarle una foto con la Polaroid… enfermos de lumbago abstenerse!!!

Recuerda…

Disfruta el tiempo.
Sé fiel contigo.
Sigue tu camino.

Alea jacta est
Julio Cesar

Hasta un nuevo encuentro…
Khyronthell

Ilustración: Dancer pinup by Roberto Campus
Foto: Teatro Maipo

marzo 07, 2008

Justo ahora

La noche llegó y con ella las ganas de escribir algunas frases que andan dando vueltas por los rincones de mi cabeza; por compañía tengo un café apenas tibio, el humo del cigarrillo y alguna música que vuelve más amena la ocasión…

Busco darle forma a las ideas, pienso y repienso las horas, los días, los años; me vuelo y recuerdo los últimos momentos y me imagino en otro paisaje mundano, en otra hora humana; regreso a la mesa y se me presentan las imágenes y la pregunta… ¿Cuántos están en otra historia justo ahora, y cuántos en la misma?

Justo en este momento, mientras garabateo estas palabras, algunos estarán despertándose, algunos acostándose, otros desayunando o almorzando o cenando; cuantos arreglando el jardín, cuantos trabajando, cuantos haciendo el amor; unos llegando, unos partiendo; quien rezando, quien maldiciendo…

Pero todos, absolutamente todos, viviendo; todos y cada uno de los que habitamos este inmenso y a la vez pequeño planeta estamos viviendo justo ahora, en este exacto momento; haciendo lo que en este preciso momento tenemos o queremos hacer; viviendo como se puede, quizás con opulencia o en la mayor de las pobrezas; con la mesa llena de comida o solamente con una cacharro de agua y algún pedazo de pan viejo; tal vez mirando en la TV como están las cosas o divirtiéndonos con algún programa, o bien, a la luz de una tenue vela o simplemente con la luna de fondo mirándonos las caras en silencio pensando como podemos estar mejor…

Contradicciones típicas de un mundo contradictorio desde su más intima naturaleza, y así estamos vos, yo, el otro; allá y acá; y mientras estas leyendo esto seguramente otro esta llorando la perdida de un ser querido y otro bañando al perro y otro revolviendo la basura para ver si puede comer algo…

Pero esa es la realidad, y también la verdad, y cada uno de nosotros mira su metro cuadrado y quizás un poco mas allá, pero no pasa del lugar donde están tus más allegados, tu familia, tu pareja, tus hijos; pero más lejos no miramos porque, puede causar estupor, vergüenza, temor y otras tantas cosas por el estilo, más allá de ese metro cuadrado no se ve… o no se quiere ver.

Hipocresía? Mmm… puede ser, lo cierto es que todos estamos en la misma, vos, yo y el otro, a pesar de las diferencias, de la raza, la lengua, la religión o el equipo de fútbol, todos compartimos el mismo aire, el mismo sol, la misma luna, el mismo planeta.

Y aquí me nace otra pregunta… ¿Cuántos hacen algo por el planeta? A ver… quizás y con suerte el 0.001 % de seis mil millones de tipos!!! Un pequeño grupo de locos ecologistas, mientras la mayoría de nosotros nos pasamos las horas pensando en comprarnos lo último en tecnología, la última pilcha de moda, buscando cada vez mejor posición o status quo; haciéndole un honor a ese proverbio árabe que dice: “El hombre celebra las virtudes del agua, al tiempo que bebe vino”

Quién le puso el nombre de “Tierra” al planeta? Quién “ser humano” a nosotros? Porque es verdad que el planeta tiene más agua que tierra y que nosotros de humanos tenemos menos que de animales y de animales mucho más que un animal cualquiera, al menos los animales tiene el instinto de superación y supervivencia, mientras que nosotros tenemos el instinto de “superposición”, cuanto más arriba estoy, mejor estoy y los otros me miran de abajo!!!

En fin, somos así, eso no podemos negarlo; creemos así, actuamos así, vivimos así y morimos así; y mientras nuestra vida transcurre nos rasgamos las vestiduras y nos volvemos solidarios cuando nos enteramos que otro necesita algo y le mandamos esa ropa que hace ya tiempo que no usamos, y nos escudamos en ese dicho popular que anda dando vueltas… “Es lo que hay” Olvidándonos de lo que le sigue a esa frase… Hasta que deja de haber!!!

By Khyronthell

Recuerda…

Disfruta el tiempo.
Sé fiel contigo.
Sigue tu camino.

Lo esencial es invisible a los ojos.
Antoine de Saint Exupery

Hasta un nuevo encuentro…
Khyronthell


Ilustración: Kamelot black halo by Derek Gores

febrero 15, 2008

Amphisbaena

La Amphisbaena (æmfɪsbinə), es una serpiente con dos cabezas y su nombre proviene de las palabras griegas amphis, que significa "ambos sentidos", y bainein, que significa "ir". Hay quienes afirman que se trata de una especie de dragón africano, pero su origen mitológico proviene de Grecia. Cuenta la historia que cuando Perseus caminó por el desierto libio con la cabeza de la Medusa Gorgona, de la cabeza de ésta caían gotas de sangre y de ahí nació la amphisbaena; tiempo después, cuando el ejército de Cato cayó marchando por Libia, ésta se alimentó de los de los cadáveres dejados detrás.

En otras historias, el escritor y naturalista romano Plinio el viejo (23 – 79 D.C.) fue quien realizó una de las primeras descripciones sobre la amphisbaena, mostrándola como una serpiente venenosa: “tiene una cabeza doble, esto es que tiene una en el final también, como si no fuera suficiente con el veneno para ser vertido de una sola boca”. Por otro lado, los dibujos medievales a menudo la muestran con dos o más pies escalados, en particular pies de pollo y alas emplumadas. Unos hasta la representan como una criatura con cuernos, parecida a un dragón con una cola con cabeza de serpiente y oídos pequeños, redondos, mientras los otros tienen "cuellos" del tamaño igual de modo que no pueda ser determinado que es la cabeza trasera.

Muchas descripciones de la amphisbaena dicen que es una serpiente que tiene marcas en la cola que parece a una cabeza. Afirman también que cuando la serpiente es atacada o se siente en peligro, levanta su cola para espantar a su atacante; se dice que ésta criatura puede renovarse a sí misma por su propio cuello, y que si se la corta al medio, las cabezas se repondrán cuanto antes. La amphisbaena puede "ir en ambos sentidos" pero rodando, no andando. Algunas historias afirman que cuando pone sus huevos, una de las cabezas va a estar siempre atenta para rechazar a enemigos. Es por estos, y quizá otros motivos, que muchas veces se cree que es la base para los dragones y que los escritores que la describieron simplemente embellecieron sus cualidades.

En tiempos antiguos, se decía que la peligrosa amphisbaena tenía su madriguera en el desierto, que sabia nadar y poseía colmillos venenosos; también se creía que su mayor poder era la hipnosis y que mirarla a los ojos directamente en luna llena provocaba la muerte inmediata.

Se la llamaba además, Amphista y Amphivena, por el supuesto poder que otorgaba a las mujeres cuando estas usaban en los brazos, una pulsera que semejaba a la amphisbaena. Como contrapartida se la utilizaba en la medicina popular, aduciéndole poderes como el que si una mujer llevaba alrededor de su cuello una viva tendría un embarazo seguro; que si se comía su carne, uno podría atraer a muchos amantes del sexo opuesto; que si el objetivo es curar enfermedades como la artritis, los sabañones o el resfriado común sólo se utilizaba su piel, entre otras tantas aplicaciones.

El amphisbaena fue nombrada en poesias y cuentos legendarios por escritores como el Nicander, John Milton, Alexander Pope, Alfred, Señor Tennyson, y A. E. Housman; y tambien como una criatura mitológica y legendaria por Lucano, Plinio el Viejo, Isidore de Sevilla; por su parte, Thomas Browne, fue el último de los que desacreditó su existencia.

Recuerda…

Disfruta el tiempo.
Sé fiel contigo.
Sigue tu camino.

Los amigos son como la sangre, cuando se está herido acuden sin que se los llame.
Anónimo

Hasta un nuevo encuentro…
Khyronthell

Ilustración: Dragons Fog by Hugh Jamieson

enero 25, 2008

Antanavo

El lago sagrado de los Antankarana

En el país Antankarana, en el norte de Madagascar, se encuentra el lago Antanavo. Cuenta el pueblo Antankarana que hace mucho tiempo, donde hoy está el lago existía un gran poblado que tenía su rey, príncipes y princesas, grandes manadas de vacas y campos de yuca, patatas y arroz.

En este pueblo, mezclados entre la población, vivían un hombre y una mujer a quienes sus vecinos no conocían. Se habían casado y tenían un niño de unos seis meses de edad.

Una noche, el niño empezó a llorar, sin que la madre supiera qué hacer para calmarlo. A pesar de las caricias de la madre, de acunarlo en sus brazos e intentar darle de mamar, el niño no dejaba de llorar y gritar.

Entonces, la madre tomó al bebé en brazos y se fue a pasear con él a las afueras del pueblo, sentándose bajo el gran tamarindo donde las mujeres solían juntarse por la mañana y por la tarde para moler arroz, por lo que lo llamaban Ambodilôna. La madre pensó que la brisa y el frescor de la noche calmarían al niño, en cuanto ella se sentó, el niño se calló y se quedó dormido. Entonces, suavemente volvió a su casa, pero ni bien cruzó la puerta, el niño se despertó y comenzó otra vez a llorar y gritar.

La madre salió nuevamente y volvió a sentarse en un mortero de arroz y, como por encantamiento, el niño dejó de llorar y volvió a dormirse. La madre, que quería volver junto a su marido, se levantó y se dirigió hacia la casa. De nuevo, en cuanto la mujer cruzó el umbral de la puerta el niño se despertó y comenzó a llorar violentamente. Por tercera vez hizo la madre lo mismo, y las tres veces el niño, se dormía en cuanto ella se sentaba en el mortero de arroz, y se despertaba cuando ella intentaba entrar en casa. La cuarta vez, decidió pasar la noche bajo el tamarindo.

Apenas había tomado esta decisión, cuando de repente todo el pueblo se hundió en la tierra desapareciendo con un gran estruendo. Donde hasta entonces había estado el pueblo, no quedaba sino un enorme agujero, que de pronto comenzó a llenarse de agua hasta que ésta llegó al pie del tamarindo donde la mujer, asustada, sostenía a su hijo, apretándolo entre sus brazos.

En cuanto se hizo de día, la mujer fue corriendo hasta el pueblo más cercano para contarles lo que había sucedido ante sus ojos y cómo habían desaparecido todos los vecinos. Desde entonces, el lago adquirió un carácter sagrado. En él viven muchos cocodrilos en quienes los Antankarana y los Sakalava creen que se refugiaron las almas de los antiguos habitantes de la aldea desaparecida bajo las aguas. Por esta razón, no sólo no los matan sino que les dan comida en ciertas fechas.

Tanto el lago Antanavo, como los cocodrilos que en él habitan, y el gran tamarindo Ambodilôna, son venerados y se acude a ellos para pedir ayuda. Cuando una pareja no puede tener hijos, acude al lago e invoca a las almas de los habitantes desaparecidos pidiéndoles que se le conceda una numerosa descendencia, prometiendo a cambio, volver para ofrecerles el sacrificio de animales para su alimento. Cuando la petición tiene éxito, la pareja regresa al lago para cumplir lo prometido. Los animales se sacrifican muy cerca del agua, una parte de la carne se echa al agua y otra se reparte por las cercanías del lago para provocar que los cocodrilos se alejen lo más posible del agua porque piensan que cuanto más se alejen mayor será la ayuda que proporcionarán.

Cuando un Antakarana cae enfermo, se lo lleva muy cerca del lago, se lo lava con sus aguas y dicen que se cura. Está prohibido bañarse en sus aguas e incluso hasta meter en ellas las manos o los pies. Cuando uno quiere beber o tomar agua del lago, debe hacerlo con la ayuda de un recipiente colocado al final de una vara larga y sólo puede beberla a algunos pasos de la orilla. También está prohibido escupir en el lago o cerca de él, como hacer sus necesidades en los alrededores. Se cree que quien violara estas prohibiciones sería devorado tarde o temprano por los cocodrilos.

Recuerda…

Disfruta el tiempo.
Sé fiel contigo.
Sigue tu camino.

Cuando los elefantes luchan, la hierba es la que sufre.
Proverbio africano

Hasta un nuevo encuentro…
Khyronthell

Ilustración: Beauty & the best by Chris Achilleos

enero 04, 2008

El Principio

En un solo segundo es posible crear algo tan maravilloso como la vida misma; en 20 segundos se creó el universo y en millones de años el hombre asomó su cara sobre la faz del planeta por primera vez; en siete días Dios creó el mundo…

En un solo momento surgió una idea, en unos pocos minutos se inicio un proyecto, en unas cuantas horas un artista acabó su obra, en un instante quedo registrado aquel momento…

En el ultimo segundo del dolor comenzó el primer segundo de la alegría y justo ahí naciste, abriste los ojos y conociste algo que nunca habías visto, así continuaste y llegaron a tu vida, la primer palabra, el primer paso, la primer caída y el primer asombro… descubriste a mamá y a papá.

Te enojaste por la primer mentira descubierta, debutaste con la soledad un día de invierno, encontraste la raíz del perdón en verano, estrenaste el olvido en otoño y en primavera tuviste la primicia del amor…

Tu vida continuo y en ella comenzaron a aparecer un sin numero de situaciones…

Tuviste tu primer día de escuela y te asustaste porque mamá no estaba, era otra persona la que estaba con vos; tuviste que darle a otro que no conocías algo que te gustaba y ahí apareció la primer pelea con un compañero, tuviste que aprender a compartir…

Luego llego la secundaria y ahí apareció como por encanto tu primera emoción fuerte, te llegó el primer amor y la primera vez, esa primera vez… en algún momento remoto fuiste la causa de la primera lágrima de alguien, y alguien de la tuya, y lo mismo pasó con la sonrisa, conociste le emoción en un abrazo fraterno que fue la base de la amistad…

Después llegó la universidad y salieron a escena los nervios el día que tuviste que dar tu primer final, te nacieron recuerdos de aquellos compañeros que ya no ves (que será de ellos no?), pero tu vida continuo y así fue como votaste por primera vez y te iniciaste en la democracia, amaneció un nuevo día en tu horizonte y gritaste como nunca antes contra la desidia, la desorganización, la corrupción y te decidiste a participar y descubriste los errores del sistema y te revelaste y decidiste hacer lago para cambiarlos y te golpeaste y te golpearon y te caíste y perdiste la fe… pero igual seguiste, te hicieron entender que debías modificar algo y… te recibiste (o quizás abandonaste)

Justo ahí fue cuando empezaste a trabajar y de la matriz de los sentimientos aparecieron el miedo, el rencor, la bronca, el engaño, la verdad, la franqueza, la honestidad, la generosidad, la sumisión, el entregarte por una causa… y tu propia voz hablándote al oído, diciéndote que ya no eras un niño y que de ahora en mas tu vida dependía solamente de vos…

Y ahí te llovieron situaciones por doquier, giraste la cabeza y viste la miseria y acudiste con la solidaridad; existió el peligro y arrancaste de tu interior la fuerza para salir adelante de los problemas; se te vino la noche cuando te topaste con la muerte cara a cara y le ganaste y festejaste; gano tu equipo el campeonato y te emborrachaste de alegría y de alcohol y te bancaste la resaca y los retos de tu vieja; saliste a la calle con tu primer auto y chocaste… te llegó el éxito y también el fracaso, el triunfo y la derrota y hasta se coló por la manga de la camisa esa cachetada que tanto dolió… tu pareja te miro a los ojos y te paralizaste y por una vez en tu vida sabias muy bien lo que tenias que decir pero… después de pensarlo mejor preferiste quedarte callado y nació el silencio.

Se te aparecieron fantasmas del pasado justo en el momento en que mejor estabas y casi mandas todo al carajo pero decidiste pelearla; tu castillo se desmoronaba pero supiste apuntalarlo a fuerza de coraje, razón y constancia y a no darte por vencido, a no renunciar a tu felicidad…

Que palabra no? Cómo era eso de la felicidad? A donde se quedo? Ah ya recuerdo, justo ahí, mira, en el espejo, del otro lado, en esa imagen de tu cara… entonces tuviste un empiece con aquel café a solas y un preámbulo con la poesía, colocaste los cimientos de tu casa, de tu familia; entonces te nació esa primer idea y comenzaste ese primer proyecto y cuando estabas en esa vorágine, escuchaste ese primer grito y viste el nacimiento de tu primer hijo y te desmayaste y todo lo malo que te pudo haber pasado ya no pesaba tanto, tenias ahora un nuevo principio, algo nuevo porque seguir luchándola hasta el fin…

Ahí te diste cuenta que cada cosa tiene su propio tiempo y su propio lugar y que cada uno de ellos es único e irrepetible; y acabaste por darte cuenta que todo es un principio, que siempre es un principio, que constantemente uno empieza justo donde termino, que hoy será indefectiblemente ayer por mas que uno intente que así no suceda y que entonces es preferible disfrutar ahora porque después no sabes y tendrás nuevos principios que disfrutar y los que no disfrutes ahora ya no los podrás disfrutar…(uf que juego de palabras!!!)

En definitiva, decirle principio, origen, causa, apertura, inicio, génesis, estreno, debut o cualquier otro sinónimo que uno le quiera poner, vale para tener en claro que en todos los ordenes y en todos los momentos de la vida y a cada instante, uno empieza lo que fuere, porque siempre esta presente el primer momento de cada momento, de cada situación, de cada sentimiento…

Hay un umbral, un punto de partida para todas esas primeras veces, un núcleo del cual todos provenimos y que se reparte en millones de núcleos y primeras veces…

Entre tanto, algunos buscan incansablemente las respuestas a como fue que ocurrió, donde comenzó todo, cual fue la raíz de las cosas que nos toca vivir, como fue aquella primera vez del universo y de la vida y del hombre y hasta se empeñan en buscar la primera vez de las primeras veces porque saben que mas allá de una primera vez debe existir otra anterior y así sucesivamente, y mientras eso ocurre la vida continua, entonces vamos dejando tantos principios de lado, como piedras a los costados del camino hay…

By Khyronthell

Recuerda…

Disfruta el tiempo.
Sé fiel contigo.
Sigue tu camino.

No importa cuanto vivamos, sino como lo hagamos.
Bailey

Hasta un nuevo encuentro…
Khyronthell

Ilustración: Phoenix by Boris Vallejo